Bebidas azucaradas
En la actualidad el consumo de bebidas azucaradas ha ido aumentado progresivamente en la dieta de las personas, y es que desafortunadamente estas bebidas constituyen una de las mayores fuentes de azúcar.
La Organización Mundial de la Salud advierte que el consumo habitual de las bebidas azucaradas contribuye, entre otras causas, al sobrepeso, a la obesidad, diabetes, síndrome metabólico, hipertensión, enfermedad coronaria, caries dentales y a la osteoporosis. Es por eso que la OMS recomienda un consumo de 50 gramos de azúcar.
La osteoporosis se produce debido a una reducción de la densidad de la masa ósea, algo especialmente importante en el caso de mujeres, más propensas a padecerla. Esta enfermedad se produce por preferir las bebidas azucaradas a la leche, disminuyendo el aporte de calcio.
Otro de los problemas alarmantes de la sociedad actual es el sobrepeso y la obesidad, que también se relaciona con el consumo de calorías que tienen las bebidas. Pero además por la estimulación del apetito y de una mala respuesta a la saciedad, sobre todo cuando contiene fructosa, ya que contribuye a la resistencia a la insulina, y por lo tanto al desarrollo de la diabetes. Los estudios muestran, además, que un refresco azucarado al día supone engordar 6,75 kilos al cabo de un año.
Además de todos los problemas y enfermedades que ocasionan el consumo excesivo de las bebidas azucaradas, también producen un aumento de la erosión y pérdida de esmalte de los dientes, y por supuesto la aparición de caries. Es por eso que es importante controlar su consumo y tener una dieta sin excesos de azúcar, para poder evitar así futuros problemas tanto de salud general, como salud bucodental.